Su discreta presencia tranquiliza a la nutrida afición 'Oranje': desde el inicio del Mundial femenino, cuatro policías holandeses aseguran, en coordinación con la policía francesa, la seguridad de los aficionados desplazados a Francia.
Este martes, antes del partido de octavos Holanda-Japón, en Rennes, se podía ver a policías holandeses protegiendo la llegada de las campeonas de Europa, recibidas con fervor por unos 200 aficionados.
La afición 'Oranje' había comenzado a congregarse sobre las 17h00 locales en la ciudad francesa, entonando cánticos populares y de apoyo a su selección, que llegó a la cita sin conocer la derrota en el Grupo E.
Dos policías fisonomistas, especializados en hooliganismo, y otros dos miembros de las fuerzas de seguridad se hallan movilizados durante el Mundial.
Después de su paso por Reims o Valenciennes, estos policías, reconocibles por su atuendo oscuro, prosiguen su misión en Rennes.
Mariannie, aficionada llegada desde Holanda, valora la presencia de estos funcionarios nacionales. "Es mejor para la comunicación, especialmente si hay algún problema, porque muchos holandeses no hablan francés", señala.
No hay comentarios:
Publicar un comentario