El gol marcado, la forma en la que se produjo la jugada, su colr de piel y su pasado futbolístico fueron los condicionantes. Yuri fue vilipendiado el pasado sábado a la conclusión del partido RC Celta-Deportiva. Los factores que concurrieron fueron bastantes y algunos de los gritos fueron los mismos recibidos por jugadores como Eto´o o recientemente Nyom en El Toralín, que supusieron multas por ser considerados por los estamentos competentes como racistas. «¡Uh, uh, uh!» o «Yuri, mono» fueron algunos de los que tuvo que aguantar, además de otros «menos ofensivos» como «Yuri púdrete en Segunda B». La amplia presencia de policía y seguridad privada evitaron que los radicales que esperaron al jugador en el acceso a vestuarios al término del choque pudiesen acercarse al mismo.
Además de ser mulato y de marcar el gol en tiempo de prolongación, Yuri lo celebró junto a los hinchas más radicales del equipo vigués. Por si fuera poco, el brasileño ha sido jugador en dos etapas distintas del Pontevedra CF, uno de los dos clásicos enemigos deportivos del RC Celta. El acta arbitral redactada por Santiago Jaime Latre también recoge el lanzamiento de objetos contra los futbolistas del conjunto berciano: «En el minuto 88, tras la consecución del gol del equipo visitante y cuando los jugadores de este equipo estaban celebrando el gol en la zona cercana a uno de los banderines de esquina, se lanzaron desde una parte de la grada ocupada por seguidores del equipo local dos botellas de plástico semivacías. Debido a la distancia que existe desde la grada hasta el terreno de juego, estas botellas no llegaron al terreno de juego ni impactaron en ningún jugador».
La afición gallega, molesta con que la SDP siguiese la jugada que acabó en el empate cuando David Rodríguez estaba en el suelo, acabó gritándole al equipo berciano «A Segunda B», algo que ya le ocurrió en algún otro campo en la anterior presencia en la categoría.
Además de ser mulato y de marcar el gol en tiempo de prolongación, Yuri lo celebró junto a los hinchas más radicales del equipo vigués. Por si fuera poco, el brasileño ha sido jugador en dos etapas distintas del Pontevedra CF, uno de los dos clásicos enemigos deportivos del RC Celta. El acta arbitral redactada por Santiago Jaime Latre también recoge el lanzamiento de objetos contra los futbolistas del conjunto berciano: «En el minuto 88, tras la consecución del gol del equipo visitante y cuando los jugadores de este equipo estaban celebrando el gol en la zona cercana a uno de los banderines de esquina, se lanzaron desde una parte de la grada ocupada por seguidores del equipo local dos botellas de plástico semivacías. Debido a la distancia que existe desde la grada hasta el terreno de juego, estas botellas no llegaron al terreno de juego ni impactaron en ningún jugador».
La afición gallega, molesta con que la SDP siguiese la jugada que acabó en el empate cuando David Rodríguez estaba en el suelo, acabó gritándole al equipo berciano «A Segunda B», algo que ya le ocurrió en algún otro campo en la anterior presencia en la categoría.
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