El club búlgaro de fútbol Botev de Plovdiv recibió por segunda vez en menos de diez días una sanción por el comportamiento racista de sus hinchas, esta vez por unos incidentes en el encuentro contra el Litex de Lovech el pasado 13 de septiembre.
La Unión Búlgara de Fútbol (UBF) castigó al club a jugar un partido más en terreno propio sin público tras sancionarlo el pasado 18 de septiembre a pagar una multa de 37.500 levas (18.750 euros) y jugar ante tribunas vacías.
Fuentes de la UBF confirmaron que el máximo órgano del fútbol en el país balcánico retiró también tres puntos al club por insultos y pancartas racistas de los aficionados contra los jugadores del subcampeón búlgaro, Levski, durante un encuentro el pasado 17 de agosto.
La decisión fue tomada por la comisión disciplinaria tras recibir una carta de la organización Fútbol contra el Racismo en Europa (FARE), que invita a varias organizaciones, entre ellas la UEFA, a tomar medidas adecuadas para luchar contra la discriminación racista o xenófoba.
"Recibimos informaciones de Bulgaria de que durante el encuentro entre Botev y Levski los aficionados del club de la ciudad de Plovdiv organizaron una coreografía nazi e insultaron a los jugadores de la plantel rival con sonidos que emiten habitualmente los monos", reza la misiva de FARE a la UBF.
"Si estas informaciones son ciertas, instamos a la UBF a tomar las medidas adecuadas para no permitir la repetición de muestras racistas y nazis", añade la carta, firmada por Curt Watcher.
Botev, fundado el 12 de marzo de 1912, lo que lo convierte en el equipo de mayor antigüedad aún vigente en Bulgaria, se queda con 0 puntos y ocupa el último puesto en la calificación del campeonato local.
La Unión Búlgara de Fútbol (UBF) castigó al club a jugar un partido más en terreno propio sin público tras sancionarlo el pasado 18 de septiembre a pagar una multa de 37.500 levas (18.750 euros) y jugar ante tribunas vacías.
Fuentes de la UBF confirmaron que el máximo órgano del fútbol en el país balcánico retiró también tres puntos al club por insultos y pancartas racistas de los aficionados contra los jugadores del subcampeón búlgaro, Levski, durante un encuentro el pasado 17 de agosto.
La decisión fue tomada por la comisión disciplinaria tras recibir una carta de la organización Fútbol contra el Racismo en Europa (FARE), que invita a varias organizaciones, entre ellas la UEFA, a tomar medidas adecuadas para luchar contra la discriminación racista o xenófoba.
"Recibimos informaciones de Bulgaria de que durante el encuentro entre Botev y Levski los aficionados del club de la ciudad de Plovdiv organizaron una coreografía nazi e insultaron a los jugadores de la plantel rival con sonidos que emiten habitualmente los monos", reza la misiva de FARE a la UBF.
"Si estas informaciones son ciertas, instamos a la UBF a tomar las medidas adecuadas para no permitir la repetición de muestras racistas y nazis", añade la carta, firmada por Curt Watcher.
Botev, fundado el 12 de marzo de 1912, lo que lo convierte en el equipo de mayor antigüedad aún vigente en Bulgaria, se queda con 0 puntos y ocupa el último puesto en la calificación del campeonato local.
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