La hermana del aficionado del Olympique de Marsella Santos Mirasierra, arrestado en España tras el partido que su equipo disputó frente al Atlético de Madrid, aseguró que la policía francesa le golpeó durante su arresto.
"Le apalearon, le dolían todos los huesos, tenía tanto dolor que se lanzó contra una ventana. Sangraba por todos los lados y no paraba de gritar", aseguró Lucile Mirasierra en un vídeo difundido hoy por la página digital del diario "L''Équipe".
La hermana del aficionado afirma que no les dejaron visitar al detenido "porque estaba demasiado marcado y no querían que se le viera así". En el vídeo relata que Mirasierra llegó a arrancarse él mismo los puntos de sutura que le habían dado en la cabeza para evitar llamar la atención por miedo a que le golpearan de nuevo.
Mirasierra fue arrestado el pasado 1 de octubre tras los incidentes entre los aficionados del Marsella y las fuerzas del orden. A principios de este mes, la Fiscalía anunció que pedirá ocho años de cárcel contra el arrestado, cuatro por un delito de desórdenes públicos y otros cuatro por un delito de atentado en concurso con un delito de lesiones por la agresión a un agente de policía.
Mirasierra contrató al mediático abogado francés Gilbert Collard, conocido por utilizar los medios de comunicación en sus líneas de defensa. En declaraciones al diario "La Province", el letrado señaló que Mirasierra ha sido tratado en España como un "hooligan" y "con todos los prejuicios que se atribuyen a los marselleses".
En España "hay un racismo ''anti-marsellés''" y la justicia española "quiere dar ejemplo (...) en la piel de un francés". "Hay que valorar la dimensión humana de Santos, es decir, lo humanitario que es. Todos esos elementos no aparecen", señaló el abogado.
"Creo que se está tratando a Santos con una extraordinaria severidad. La pena que se le reclama es enorme con respecto a la jurisprudencia internacional. Ni que hubiese matado a alguien", comentó.
"Le apalearon, le dolían todos los huesos, tenía tanto dolor que se lanzó contra una ventana. Sangraba por todos los lados y no paraba de gritar", aseguró Lucile Mirasierra en un vídeo difundido hoy por la página digital del diario "L''Équipe".
La hermana del aficionado afirma que no les dejaron visitar al detenido "porque estaba demasiado marcado y no querían que se le viera así". En el vídeo relata que Mirasierra llegó a arrancarse él mismo los puntos de sutura que le habían dado en la cabeza para evitar llamar la atención por miedo a que le golpearan de nuevo.
Mirasierra fue arrestado el pasado 1 de octubre tras los incidentes entre los aficionados del Marsella y las fuerzas del orden. A principios de este mes, la Fiscalía anunció que pedirá ocho años de cárcel contra el arrestado, cuatro por un delito de desórdenes públicos y otros cuatro por un delito de atentado en concurso con un delito de lesiones por la agresión a un agente de policía.
Mirasierra contrató al mediático abogado francés Gilbert Collard, conocido por utilizar los medios de comunicación en sus líneas de defensa. En declaraciones al diario "La Province", el letrado señaló que Mirasierra ha sido tratado en España como un "hooligan" y "con todos los prejuicios que se atribuyen a los marselleses".
En España "hay un racismo ''anti-marsellés''" y la justicia española "quiere dar ejemplo (...) en la piel de un francés". "Hay que valorar la dimensión humana de Santos, es decir, lo humanitario que es. Todos esos elementos no aparecen", señaló el abogado.
"Creo que se está tratando a Santos con una extraordinaria severidad. La pena que se le reclama es enorme con respecto a la jurisprudencia internacional. Ni que hubiese matado a alguien", comentó.
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