El Real Zaragoza participará en el homenaje a Pedro Longarón, el aficionado que falleció el pasado lunes por la mañana después de no poder superar el derrame cerebral que sufrió en su butaca de La Romareda en el partido del domingo contra el Mirandés. El club aragonés, muy atento a este trágico episodio desde el momento en el que se produjo, ya ha contactado con la familia de Pedro para coordinar el reconocimiento que se le dedicará en los instantes previos del próximo partido del Real Zaragoza en casa, fijado para el domingo 3 de noviembre a las 18.30 en La Romareda contra Las Palmas.
Según la familia, no habrá minuto de silencio, sino que se realizará la ofrenda de un ramo de flores en el asiento que ocupaba con su abono Pedro en la grada norte del estadio, a la vez que se le menciona por la megafonía y se honra su memoria con un aplauso de los aficionados. El Zaragoza tomará testimonio gráfico y audiovisual de todo ello.
Pedro Longarón, de Montañana, tenía 77 años y sumaba 42 temporadas como abonado del Real Zaragoza. Falleció el lunes por la mañana en el hospital Miguel Servet debido a las graves lesiones provocadas por el derrame cerebral que sufrió en la segunda mitad del partido del pasado domingo entre el equipo aragonés y el Mirandés. Las asistencias médicas de urgencia destacadas en La Romareda actuaron de inmediato y se le trasladó al hospital con rapidez, pero su estado al momento de ingresar era ya crítico y nada se pudo hacer por salvar su vida.
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