La juez de Gavà ha ordenado el ingreso en prisión de siete miembros de los casuals, la facción más radical de los boixos nois, agrupación de ultras seguidores del Barça, por una larga lista de supuestos delitos, entre los que se encuentran intento de homicidio, tráfico de drogas o lesiones. El balance final de la operación llevada a cabo por los Mossos contra este grupo es de nueve personas encarceladas y otras cinco en libertad pero con obligación de comparecer ante la jusiticia periódicamente.
La titular del juzgado de instrucción número 3 de Gavà terminó de tomar declaración ayer a las cuatro de la madrugada a los últimos detenidos en la redada contra los casuals. En total, en dos turnos, pasaron a disposición judicial 14 personas. De los últimos diez siete han ingresado en la cárcel. A pesar de que las diligencias se hallan en secreto, ha trascendido que se les imputa al grupo una amplia variedad de delitos, entre los que estarían que se contrataban para propinar palizas.
Al parecer, algunos empresarios de ocio nocturno fueron víctimas de los contratos que aceptaron. A estas actuaciones está vinculada la acusación de tentativa de homicidio para cinco de los acusados, así como las de lesiones y extorsión. También se les imputa a todos los encarcelados asociación ilícita; es decir, formar parte de un grupo estructurado para delinquir.
También hay otras modalidades fuera de la ley incluidas en los autos de la juez: tenencia ilícita de armas, blanqueo de dinero, o robo. Otros tres detenidos que pasaron a disposición quedaron en libertad provisional con cargos y la obligación de comparecer ante la oficina judicial cada quince días.
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