Francia vive una escalada de violencia constante en las gradas de los estadios. Esta noche se ha suspendido finalmente el choque entre el Lyon y el Marsella después de que Payet fuera golpeado con una botella en un saque de esquina nada más empezar. Antes de este lamentable episodio, las autoridades policiales habían anunciado que no van a dejar que aficionados del PSG acompañen al equipo a Lens el próximo 4 de diciembre. El riesgo a que ocurran más incidentes ha propiciado tomar esta drástica decisión.
El encuentro se ha declarado de alto riesgo después del historial que hay entre ambos equipos. No es la primera ni la última medida en ese sentido. A finales de octubre tampoco permitieron que los hinchas parisinos viajasen a Marsella y tampoco van a hacerlo la semana que viene a Saint-Étienne. Con base a la ley, “se permite restringir la libertad de circulación de personas que se reconocen simpatizantes de un equipo (…) cuya presencia puede provocar desorden público”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario