El presidente de la Liga de Fútbol Profesional, Javier Tebas, ha destituido fulminantemente al expresidente del Deportivo de la Coruña, Augusto César Lendoiro, nombrado en mayo embajador de la LFP para contribuir a la expansión internacional y la imagen de la entidad, tras saber que había acudido al funeral por Francisco Javier Romero, Jimmy, el ultra fallecido el pasado domingo en una pelea en Madrid.
Lendoiro, que dirigió el club coruñés durante 25 años, se sumó este miércoles a la despedida de los restos mortales de Romero en el cementerio municipal de Feáns, próximo al casco urbano de A Coruña. Más de un centenar de personas componían el cortejo fúnebre del hincha del Deportivo. Su féretro estaba coronado por una bandera gallega y una enseña de Los Suaves, la facción de los Riazor Blues en la que se encuadraba. Hubo bengalas y algún bote de humo, pero no se registraron incidentes más graves. Un importante despliegue de seguridad, con cinco furgones de la policía, vigiló las inmediaciones del cementerio
A nivel institucional el Deportivo había expresado a través de un comunicado su apoyo a la familia del seguidor muerto en la refriega con el Frente Atlético el pasado domingo, pero ningún representante del club acudió ni al entierro ni al velatorio. Las relaciones con los Riazor Blues son tensas y más después de que el presidente Tino Fernández modulara su discurso público del mediodía del martes y asegurase horas después que se iba a identificar a los integrantes del grupo y que bastantes de ellos no sólo no volverían a entrar en el estadio sino que tampoco habría más símbolos o pancartas que les representasen. "Manchan el nombre del Deportivo", declaró el máximo mandatario de la entidad blanquiazul, que apuesta por el fin de los Blues.
Entre los asistentes también se encontraban un grupo llegado en autobús y que portaba bufandas con colores de otros equipos como el Rayo Vallecano. Miembros de la sección radical de la hinchada rayista, conocidos como Bukaneros, estuvieron también implicados en los incidentes del pasado domingo junto al Manzanares como aliados de los Riazor Blues durante la reyerta con el Frente Atlético.
Al término de la ceremonia fúnebre, un grupo de asistentes desplegó una pancarta blanquiazul con el lema Jimmy vive y una foto del fallecido. Además de corear cánticos de homenaje al hincha muerto, algunos de los presentes -entre los que había personas embozadas para ocultar el rostro- arrojaron botes con humo. Pero no hubo más incidentes que los gritos contra los periodistas que cubrían el entierro proferidos por una mujer.
En los accesos a la ciudad gallega se habían colocado esta mañana pancartas en recuerdo de Francisco Javier Romero, así como en las inmediaciones del estadio de Riazor, donde eran visibles banderas del Deportivo, velas, crespones negros y otras pancartas con la leyenda Jimmy siempre con nosotros.
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