Los hinchas del Napoli no tendrán permitido asistir a los partidos que su equipo juegue como visitante esta temporada de la Serie A del fútbol italiano por haber protagonizado hechos violentos el domingo cuando viajaban a ver un partido frente a la Roma, dijo este martes el ministro del Interior de ese país, Roberto Maroni.
La red de trenes de Italia indicó que los seguidores del club napolitano causaron daños tasados en 500.000 euros (725.700 dólares) después de enfrentarse a la policía y a trabajadores ferroviarios cuando intentaban abordar sin pasajes un vehículo que se dirigía a Roma.
"Mañana enviaré una directiva a los prefectos para que identifiquen a aquellos que participaron de los disturbios, de modo que queden vetados de la posibilidad de acudir a eventos deportivos por dos años y sean informados ante los jueces", declaró Maroni al canal de televisión local Rai.
"En segundo lugar, los hinchas del Napoli tendrán prohibido presenciar los partidos que su equipo juegue como visitante por el resto del campeonato", agregó.
Los aficionados lograron ocupar el tren en Nápoles y, luego de negarse a bajar, la policía debió aconsejar a los pasajeros regulares que desembarcaran el coche y tomaran otros trenes.
Además, se produjeron escaramuzas entre hinchas del club sureño y la policía en los alrededores del estadio Olímpico de Roma y también en el viaje de vuelta después del partido, que finalizó 1-1.
Italia tiene un serio problema con los seguidores violentos. Un simpatizante de la Lazio y un policía fueron asesinados en distintos incidentes ocurridos el año pasado.
Maroni señaló que, en el futuro, las autoridades tal vez se vieran obligadas a disponer que ciertos partidos calificados de "alto riesgo" se disputen a puertas cerradas.
Los medios locales indicaron que la federación italiana de fútbol podría ordenar que el Napoli juegue algunos encuentros sin público con motivo de los incidentes del domingo.
La red de trenes de Italia indicó que los seguidores del club napolitano causaron daños tasados en 500.000 euros (725.700 dólares) después de enfrentarse a la policía y a trabajadores ferroviarios cuando intentaban abordar sin pasajes un vehículo que se dirigía a Roma.
"Mañana enviaré una directiva a los prefectos para que identifiquen a aquellos que participaron de los disturbios, de modo que queden vetados de la posibilidad de acudir a eventos deportivos por dos años y sean informados ante los jueces", declaró Maroni al canal de televisión local Rai.
"En segundo lugar, los hinchas del Napoli tendrán prohibido presenciar los partidos que su equipo juegue como visitante por el resto del campeonato", agregó.
Los aficionados lograron ocupar el tren en Nápoles y, luego de negarse a bajar, la policía debió aconsejar a los pasajeros regulares que desembarcaran el coche y tomaran otros trenes.
Además, se produjeron escaramuzas entre hinchas del club sureño y la policía en los alrededores del estadio Olímpico de Roma y también en el viaje de vuelta después del partido, que finalizó 1-1.
Italia tiene un serio problema con los seguidores violentos. Un simpatizante de la Lazio y un policía fueron asesinados en distintos incidentes ocurridos el año pasado.
Maroni señaló que, en el futuro, las autoridades tal vez se vieran obligadas a disponer que ciertos partidos calificados de "alto riesgo" se disputen a puertas cerradas.
Los medios locales indicaron que la federación italiana de fútbol podría ordenar que el Napoli juegue algunos encuentros sin público con motivo de los incidentes del domingo.
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