La teoría de que el pasado domingo no hubo quedada entre los Riazor Blues y el Frente Atlético la refuerza Erlantz Ibarrondo, abogado de trece de los seguidores deportivistas detenidos por la policía y puestos en libertad con cargos: "En la entrevista personal que he mantenido con cada uno de ellos, todos me mencionan que no habían ido a una quedada". El letrado madrileño, experto en asuntos penales, asegura que estos seguidores blanquiazules son solo "aficionados que han acudido al fútbol, como otras veces, y han sido agredidos" por componentes de Frente Atlético. Al abogado le sorprende que se asegure que la pelea entre hinchas rojiblancos y deportivistas se hubiese pactado, porque de lo contrario las fuerzas de seguridad lo tendrían que saber. "Dudo mucho que la policía, y en concreto una brigada especializada en temas futbolísticos y que se caracteriza por ser escrupulosa en su trabajo, no supiese que hay una quedada", señaló en declaraciones a Radio Coruña Cadena SER y COPE.
Uno de los argumentos utilizados para justificar que coruñeses y madrileños habían quedado es que se habían detectado mensajes a través de los teléfonos móviles, que delataban ese posterior enfrentamiento, pero el letrado tiene razones para desmontar esa teoría. "Son datos importantes y queremos que se esclarezcan. A todas estas personas se les intervino el teléfono, pero la autoridad judicial no ha dado consentimiento para que se intervengan, por tanto es imposible que se conozcan las conversaciones", dijo. Alude directamente a que si ha habido algún tipo de control sobre las conversaciones telefónicas -escritas u orales- no serán válidas por falta de autorización judicial. "La policía no lo habrá hecho sin permiso", resaltó.
Ibarrondo también duda de que haya motivos para la detención de sus representados porque la mayoría se produjo "dos horas después" de la pelea. "Hay que tener en cuenta -dice- que la policía no vio las agresiones". Casi todas las detenciones se producen en los autobuses de los seguidores coruñeses o en las proximidades del hospital, en el que falleció Francisco Javier Romero Taboada, Jimmy. "Entiendo que no ha habido mala voluntad, pero lo cierto es que el único dato objetivo que usan es que presentaban partes de lesiones hospitalarias o, simplemente, presentaban lesiones de las agresiones recibidas", explicó. "Aquí hay un grupo muy heterogéneo -explica sobre sus defendidos-. Es gente que va desde los veinte y pocos años hasta los sesenta. El mayor me dijo que no es de los Blues, que había ido a tomar un café, simplemente", explica el abogado de los aficionados coruñeses. "El único nexo en común es que fueron agredidos", añadió.
Dentro de su experiencia, Erlantz Ibarrondo destaca su "enorme sorpresa" por lo que ha sucedido a lo largo de esta semana. "Es la primera vez que oigo sobre una víctima de cualquier clase que se hable más de sus antecedentes que de los hechos". "La única realidad objetiva es que han asesinado a un aficionado del Deportivo", resaltó el letrado, que pidió mucha prudencia sobre los comentarios que se puedan hacer, sobre todo "por respeto a la víctima y a sus familiares no podemos ser tan categóricos en algunas informaciones". Lo hizo muy posiblemente en referencia a los comentarios que llegan desde toda la prensa de Madrid, que criminaliza a la víctima y a los Riazor Blues, mientras que guarda silencio absoluto sobre el Frente Atlético. Entre alguno de los componentes de este grupo está el asesino de Jimmy, la segunda víctima mortal a manos de integrantes de la agrupación rojiblanca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario