Daniele Conti, capitán del Cagliari, creó una gran polémica incluso en el seno de su propio club al llevar en el partido del domingo contra el Nápoles (que los sardos, penúltimos en la Serie A, perdieron por 0-3) un brazalete con el emblema del grupo ultra de los Sconvolts, 30 de cuyos integrantes irrumpieron el viernes en el entrenamiento del equipo de Cerdeña e insultaron a los jugadores y al entonces entrenador, Zdenek Zeman, que ha dimitido este martes.
El Cagliari, que lleva 11 temporadas seguidas en la Serie A, es ahora penúltimo, a 9 puntos de la salvación. La aparición de la imagen de Conti captada por TV llevando el polémico brazalete no ha gustado a la cúpula del club sardo. Tommaso Giulini, presidente y dueño del Cagliari, admitió que “si Conti me hubiera pedido permiso para llevarlo, le hubiera dicho que no”.
El domingo Conti (hijo del legendario Bruno Conti) y Andrea Cossu (nacido en Cagliari) fueron los únicos jugadores que se salvaron de los pitos e insultos de la Curva Norte
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