«La última vez que el Sporting jugó en la ciudad se vino medio Gijón y llenamos todos los hoteles». Así explicaba ayer Rafael Benito Cases, presidente de la Asociación Empresarial de Hospedaje de A Coruña (Hospeco), la diferencia entre la ocupación que se registró en febrero del 2014 y la que tuvo lugar este último fin de semana, «que no es nada comparable por la gran caída que ha habido». Uno de los argumentos que puede explicar este batacazo en las reservas está en las peleas entre hinchas de ambos equipos que empañaron los últimos encuentros entre el Dépor y el Sporting, y que provocaron que el partido del domingo se declarase de alto riesgo ante el temor a una nueva batalla campal entre aficionados.
Otra de las circunstancias que también ha contribuido a esta caída en el número de pernoctaciones de seguidores de la mareona está en la apertura de la nueva autovía que enlaza Galicia con Asturias, «y que te permite estar en dos horas y media en Gijón, que es un viaje bastante asumible y se puede hacer sin necesidad de pasar la noche», apuntó Rafael Benito, que consideró más verosímil esta teoría a la que barajaban otras fuentes, que afirmaban que muchos seguidores se habrían alojado en hoteles de Lugo ante el temor a encontronazos con los hinchas del Dépor. «Con un trayecto que puedes hacer de un tirón en dos horas y media, no tiene mucho sentido que te quedes a mitad de camino, a no ser que quieras hacer turismo por Lugo», justificó.
A todas estas circunstancias también se suma que el encuentro de Riazor se disputó el domingo por la tarde, en lugar del sábado, un cambio de horario que también pesa mucho a la hora de reservar plaza en los hoteles, según destacó Rafael Benito, que también quiso salir al paso de ciertos rumores que criticaban que el precio de las habitaciones en la ciudad era demasiado elevado. Reconoció que las tarifas de las habitaciones no son las mismas en el mes de septiembre que en febrero, «porque aún estamos acabando la temporada de verano, hay todavía bastantes turistas y también se ha celebrado un congreso», apuntó el presidente de Hospeco.
Vuelta a primera división
Todos estos motivos podrían justificar que la llegada de aficionados del Sporting a la ciudad se redujera más de la mitad, puesto que en la última visita del equipo asturiano habían sido 7.000 seguidores los que coparon la oferta hotelera de A Coruña. En esta ocasión, y tras la vuelta del conjunto gijonés a la primera división, solamente pasaron por las gradas del estado Riazor 3.000 hinchas, mil menos de los que se esperaba en un principio y la mayoría de ellos ni siquiera durmieron en la ciudad.
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