La Policía Nacional en Asturias requisó el pasado domingo medio centenar de palos de madera y 30 tubos de poliuretano a los ultras del Racing de Santander desplazados a Gijón para presenciar el partido que enfrentó a su equipo con el Sporting, en el estadio de El Molinón.
Según informó la Jefatura de la Comisaría de Gijón de la Policía Nacional, a esta villa se desplazaron 1.500 aficionados del Racing de Santander, "entre los que se encontraban un grupo de radicales -no superior al centenar- que mantenían un comportamiento agresivo y provocador, increpando a los viandantes, lanzando improperios e insultando a los aficionados rojiblancos".
Estas personas serían previsiblemente miembros de Juventudes Verdiblancas, el grupo ultra más conocido del club santanderino, si bien el estadio cuenta con otro sector más minoritario que se denomina Cruzada Verdiblanca. Con las Juventudes, los Ultra Boys (Ultras del Sporting) mantienen una histórica rivalidad que ha derivado en varios enfrentamientos violentos.
En virtud del operativo policial puesto en marcha "para preservar la seguridad y evitar la comisión de altercados, a estos seguidores les fueron intervenidos objetos contundentes que portaban, en concreto cincuenta palos de madera y treinta tubos de poliuretano que dejaron en el suelo tras detectar la presencia policial", aseguró la Jefatura policial.
"Ante esta actitud inequívocamente ofensiva y en aras a impedir su dispersión por la ciudad con el potencial riesgo que pudiera suponer para el orden público", continúa la nota, "fueron conducidos a una zona próxima al Campo de Futbol del Molinón donde estuvieron controlados por los efectivos policiales".
"Estas medidas preventivas adoptadas con el objetivo de mantener la seguridad de los aficionados, evitar daños del mobiliario urbano o a los establecimientos comerciales u hosteleros, pueden generar alguna incomodidad a los vecinos de Gijón a quienes solicitamos, una vez más, su colaboración, comprensión y apoyo", concluyeron.
Según informó la Jefatura de la Comisaría de Gijón de la Policía Nacional, a esta villa se desplazaron 1.500 aficionados del Racing de Santander, "entre los que se encontraban un grupo de radicales -no superior al centenar- que mantenían un comportamiento agresivo y provocador, increpando a los viandantes, lanzando improperios e insultando a los aficionados rojiblancos".
Estas personas serían previsiblemente miembros de Juventudes Verdiblancas, el grupo ultra más conocido del club santanderino, si bien el estadio cuenta con otro sector más minoritario que se denomina Cruzada Verdiblanca. Con las Juventudes, los Ultra Boys (Ultras del Sporting) mantienen una histórica rivalidad que ha derivado en varios enfrentamientos violentos.
En virtud del operativo policial puesto en marcha "para preservar la seguridad y evitar la comisión de altercados, a estos seguidores les fueron intervenidos objetos contundentes que portaban, en concreto cincuenta palos de madera y treinta tubos de poliuretano que dejaron en el suelo tras detectar la presencia policial", aseguró la Jefatura policial.
"Ante esta actitud inequívocamente ofensiva y en aras a impedir su dispersión por la ciudad con el potencial riesgo que pudiera suponer para el orden público", continúa la nota, "fueron conducidos a una zona próxima al Campo de Futbol del Molinón donde estuvieron controlados por los efectivos policiales".
"Estas medidas preventivas adoptadas con el objetivo de mantener la seguridad de los aficionados, evitar daños del mobiliario urbano o a los establecimientos comerciales u hosteleros, pueden generar alguna incomodidad a los vecinos de Gijón a quienes solicitamos, una vez más, su colaboración, comprensión y apoyo", concluyeron.
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