Una pelea entre hinchas de los clubes brasileños Sao Paulo y Corinthians al final de la noche del domingo en el centro de la ciudad de Sao Paulo dejó dos personas heridas a balazos y 28 arrestados, entre los cuales dos que fueron acusados de porte ilegal de armas, informó hoy la policía.
La batalla campal con palos y piedras en la plaza del Largo de Paissandu, en el centro de la mayor ciudad brasileña, involucró a cerca de 400 personas, según la policía.
Los dos heridos son hinchas del Corinthians, uno de los cuales tiroteado en el abdomen y que está en estado grave, que regresaban a casa en diferentes autobuses tras el partido en que su club cayó por 0-1 frente al Cruzeiro por el Campeonato Brasileño.
Los autobuses del Corinthians pasaron en su recorrido por el Largo de Paissandu, en donde los hinchas del Sao Paulo conmemoraban la victoria por 3-4 sobre el Santos que dejó al campeón brasileño a apenas dos puntos del líder, por lo que las autoridades no pudieron evitar el conflicto.
"Cuando se juntan en un número grande, esos hinchas tienen la sensación de que nadie será sancionado por una pelea", explicó el teniente de policía Aurimar Cardoso, que comandó el grupo de agentes que dispersó a los peleadores.
La policía arrestó a 28 integrantes de un grupo organizado de hinchas del Sao Paulo que participaron en la gresca y se escondieron en un estacionamiento cuando los agentes llegaron al local de la pelea.
Los policías le decomisaron un revólver y una pistola a dos de estos hinchas, que ya fueron formalmente acusados de porte ilegal de armas y serán investigados para determinar si fueron los autores de los disparos que dejaron heridos a los corinthianos.
La batalla campal con palos y piedras en la plaza del Largo de Paissandu, en el centro de la mayor ciudad brasileña, involucró a cerca de 400 personas, según la policía.
Los dos heridos son hinchas del Corinthians, uno de los cuales tiroteado en el abdomen y que está en estado grave, que regresaban a casa en diferentes autobuses tras el partido en que su club cayó por 0-1 frente al Cruzeiro por el Campeonato Brasileño.
Los autobuses del Corinthians pasaron en su recorrido por el Largo de Paissandu, en donde los hinchas del Sao Paulo conmemoraban la victoria por 3-4 sobre el Santos que dejó al campeón brasileño a apenas dos puntos del líder, por lo que las autoridades no pudieron evitar el conflicto.
"Cuando se juntan en un número grande, esos hinchas tienen la sensación de que nadie será sancionado por una pelea", explicó el teniente de policía Aurimar Cardoso, que comandó el grupo de agentes que dispersó a los peleadores.
La policía arrestó a 28 integrantes de un grupo organizado de hinchas del Sao Paulo que participaron en la gresca y se escondieron en un estacionamiento cuando los agentes llegaron al local de la pelea.
Los policías le decomisaron un revólver y una pistola a dos de estos hinchas, que ya fueron formalmente acusados de porte ilegal de armas y serán investigados para determinar si fueron los autores de los disparos que dejaron heridos a los corinthianos.
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