El Fiscal considera que existe "un peligro manifiesto" para la vida y la integridad física del testigo protegido, que ya ha recibido amenazas y coacciones, y ha pedido al juez que no lo llame a declarar e incorporé la declaración que hizo con anterioridad.
La Fiscalía no considera pertinente citar al testigo protegido G303 para que declare ante el juez que investiga la muerte del hincha de Riazor Blues Francisco Javier Romero, alias Jimmy, al entender que existe "un peligro manifiesto para su vida y su integridad física".
En un escrito, al que ha tenido acceso EFE, el fiscal responde así al titular del Juzgado de Instrucción Número 20 de Madrid que hace semanas se dirigió al Ministerio Público para que emitiera un informe en el que explique si procede o no llamarle a declarar.
Dice el fiscal que "no es pertinente en este momento procesal practicar nueva declaración ante el juzgado de instrucción, atendiendo a que existe un peligro manifiesto para su vida y su integridad física, como se objetiva por los hechos acaecidos el pasado 22 de enero antes de su declaración en el juicio de menores".
Se refiere a las amenazas y coacciones que aquel día recibió a través de mensajes de Whatsapp y en su lugar de trabajo por parte de dos personas, que se encuentran en prisión provisional por estos hechos. La fiscalía pide tres años de cárcel para cada uno de ellos por un delito de obstrucción a la Justicia en el marco de la pieza que instruye el Juzgado de Instrucción Número 4 de Madrid por las amenazas y coacciones al testigo protegido del caso Jimmy.
Ante esta situación y en lugar de pedir su declaración, el fiscal se dirige al juez del Número 20 para que proceda a la incorporación a la causa del testimonio que prestó el testigo protegido en el juicio celebrado el 25 de enero en el Juzgado de Menores Número 4
Fue el fiscal quien solicitó hace meses al magistrado que citara al testigo, al tener conocimiento de su relato ante la fiscal de menores en julio de 2015, pero ahora ha cambiado de opinión al apreciar un riesgo manifiesto para su vida, por lo que se inclina por incorporar su testimonio del juicio a la causa principal.
Considera que su declaración en la vista oral de menores "se produjo con todas las garantías y estuvo sometida a los principios de inmediación, oralidad, contradicción y defensa", salvaguardando su condición de imputado en la causa principal, por lo que no se le exhortó a decir verdad.
Su testimonio fue la pieza clave para condenar a Álvaro C.G., apodado Kit-kat, líder de las juventudes de los ultras del Atlético de Madrid y principal acusado en el procedimiento de menores, a seis años de internamiento en régimen cerrado y dos de libertad vigilada por los delitos de homicidio, riña tumultuaria y tenencia ilícita de armas. Hasta ahora el único acusado y condenado por la muerte de Jimmy.
Pero en su declaración en el juicio, el testigo apuntó, además de al menor, a otras tres personas más como los autores de la muerte de Jimmy: dos de los cuatro ultras del Frente Atlético que fueron excarcelados por el juez del Número 20 y otro hincha que fue detenido por la Policía y que está imputado en la causa principal.
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