El fondo en Riazor, tan cerca y a la vez tan lejos, parece no haberse tocado todavía. Ayer se bajaron varios escalones a la vez: derrota sin paliativos por 1-3 ante el Elche, que supo controlar un partido que en ningún momento estuvo el tejado de los blanquiazules; pitos por parte de un aficionado que no ha visto ganar a su equipo en las últimas 14 jornadas y que ve la salvación a 5 puntos de distancia; pero, sobre todo, la imagen que se vio una vez acabado el encuentro, a las afueras del estadio, donde un grupo de Riazor Blues acudieron a la salida de los jugadores para reprocharles su actitud en el campo y pedirles explicaciones.
Los gritos de "Esa camiseta no la merecéis" a los jugadores y los pañuelos al palco se transformaron en una protesta contra Borja Valle, Dani Giménez y Bergantiños, capitanes y principales referentes de un equipo perdido, que tuvieron que capear el temporal y dialogar con el grupo de ultras reunido en las inmediaciones.
Esta no es la primera vez que los Blues recurren a este tipo de "medidas de presión" en un mal momento del club. La imagen de Riazor esta temporada dista mucho de la que venía dando hasta ahora, incluso en Segunda, con records de asistencia y gradas repletas. La mala marcha del equipo ha sacado a la gente del coliseo herculino, con gradas vacías y un apoyo cada vez menor.
Además, la grada parece haberse dividido, entre los que culpan a la dirección del club y los que culpan a los jugadores y cuerpo técnico de la última posición de un equipo que, después del paso de dos entrenadores por su banquillo y con más de un tercio de la liga jugada solo ha sumado una victoria en toda la campaña.
El Deportivo vive uno de los peores momentos de su historia reciente. Colistas, los herculinos solo suman una victoria en lo que va de temporada. Los blanquiazules ganaron en la primera jornada al Oviedo, y desde ahí, no han vuelto a conocer la victoria. De hecho, con Luis César suman tres derrotas y dos empates.
Así ha sido como hoy, tras el 1-3 ante el Elche, volvió a resonar en Riazor el “esta camiseta, no la merecéis”. Acompañado del clásico “directiva dimisión”. Así las cosas, a la salida del estadio se pudo ver a varios aficionados del Deportivo dialogando con los supuestos pesos pesados del equipo: Dani Giménez, Borja Valle y Álex Bergantiños.
Tras el pitido final del árbitro, los futbolistas se quedaron en el centro del campo para pedir perdón tras una nueva derrota. Así fue como la hinchada les volvió a solicitar el respeto a un escudo centenario, a unos futbolistas que hasta el momento están siendo incapaces de sacar la situación adelante.
integrantes de Riazor Blues, dialogando a la salida del terreno de juego con Dani Giménez, Borja Valle y Álex Bergantiños. Los capitanes del Deportivo explicaron su punto de vista de la situación de crisis por la que está pasando el equipo.
El Deportivo vive uno de los peores momentos de su historia reciente. Colistas, los herculinos solo suman una victoria en lo que va de temporada. Los blanquiazules ganaron en la primera jornada al Oviedo, y desde ahí, no han vuelto a conocer la victoria. De hecho, con Luis César suman tres derrotas y dos empates.
Así ha sido como hoy, tras el 1-3 ante el Elche, volvió a resonar en Riazor el “esta camiseta, no la merecéis”. Acompañado del clásico “directiva dimisión”. Así las cosas, a la salida del estadio se pudo ver a varios aficionados del Deportivo dialogando con los supuestos pesos pesados del equipo: Dani Giménez, Borja Valle y Álex Bergantiños.
Tras el pitido final del árbitro, los futbolistas se quedaron en el centro del campo para pedir perdón tras una nueva derrota. Así fue como la hinchada les volvió a solicitar el respeto a un escudo centenario, a unos futbolistas que hasta el momento están siendo incapaces de sacar la situación adelante.
integrantes de Riazor Blues, dialogando a la salida del terreno de juego con Dani Giménez, Borja Valle y Álex Bergantiños. Los capitanes del Deportivo explicaron su punto de vista de la situación de crisis por la que está pasando el equipo.
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