Lo que empezó como una fiesta de celebración acabó derivando en violentos enfrentamientos y numerosos heridos.
Río de Janeiro fue este domingo escenario de graves altercados durante de la celebración del Flamengo como reciente campeón de la Copa Libertadores.
Los hinchas más radicales del equipo brasileño iniciaron unos disturbios que obligaron a la policía a intervenir, empleando gases lacrimógenos y balas de goma contra el lanzamiento de piedras y palos por parte de los ultras.
Decenas de personas resultaron heridas y más de una veintena fueron atendidas en diversos hospitales de la ciudad carioca. Un agente resultó atropellado accidentalmente por un coche patrulla.
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