El pasado 1 de mayo la víctima se encontraba con unos amigos en una caseta de la feria cuando aparecieron una veintena de integrantes de la peña del Español RCDE Firm. Tras una breve discusión, por causas que se están investigando, agredieron al joven, lo tiraron al suelo y continuaron dándole puñetazos y patadas hasta que quedó inconsciente. Algunos clientes mediaron para detener la agresión. La víctima sufrió un traumatismo craneoencefálico y lesiones en el rostro y las piernas. Los agresores abandonaron el lugar a la carrera.
El juzgado de Instrucción número 26 de Barcelona y la Fiscalía del Odio y la Discriminación abrieron una investigación que les permitió identificar a 12 personas. Ayer detuvieron a cinco de los presuntos agresores, con edades comprendidas entre 21 y 26 años y vecinos de Barcelona, l’Hospitalet y Cerdanyola del Vallès. Se les acusa de un delito de lesiones con el agravante de abuso de superioridad y de motivación ideológica. Otros siete ultras han quedado denunciados por los mismos hechos.
Los detenidos pasan hoy a disposición judicial. La investigación sigue abierta ya que todavía hay autores de la agresión pendientes de ser identificados.
Un portavoz del RCD Espanyol ha condenado, a la agencia EFE, este tipo de episodios y ha manifestado que: "como el club ya ha ido informando a lo largo de los últimos meses, la apuesta es, claramente, disponer de una grada de animación unitaria y que no deje espacio para elementos violentos
Las mismas fuentes han asegurado: “Estamos plenamente dispuestos a seguir siendo un referente en cuanto a animación en positivo hacia nuestro equipo, con una afición modélica reconocida por toda la Liga".
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