Si ante el Numancia se escucharon leves cánticos contraBiel Cerdà que además fueron rápidamente silenciados desde el mismo sector, la zona donde se sitúan los supporters en el estadio deSon Moix, ayer la situación no es que fuera similar sino que fue radicalmente distinta.El presidente del Real Mallorca escuchó estoicamente como los aficionados más radicales del conjunto mallorquinista comenzaban un auténtico recital de cánticos que fueron en aumento tanto en volumen como en virulencia.
Más centrados en ocasiones en tomarla con el mandatario mallorquinista que en el partido en sí, los aficionados rojillos iniciaron, a los veinte minutos de partido, su ataque a Biel Cerdà con la misma frase que rezaba en una pancarta que sacaron al mismo tiempo en el que cantaban y que portaba escrita una frase, clara, concisa y contundente:«Cerdà, ves-ten ja». Como sucediera hace ahora quince días, esos primeros cánticos no fueron secundados por el resto de aficionados bermellones.
Fue en ese momento cuando se produjo una situación que fue denunciada por varios integrantes de la Grada Jove. En el mismo instante en el que los seguidores pusieron punto y final a ese primer cántico, la megafonía que suelen utilizar para animar durante los partidos se cortó sin motivo aparente. «Aunque nos corten la megafonía, no nos callarán», aseguraba uno de los supporters en su perfil de Twitter.
Poco tiempo después, los cánticos arreciaron de nuevo aunque en este caso con algo más de intensidad y descalificaciones personales contra el presidente bermellón. Hubo incluso alguna que otra dedicatoria a las pistas de fútbol 3x3 que estaban situadas, valga la redundancia, en las pistas de atletismo del Iberostar Estadio. «Puto chikipark» fue el calificativo con el que se denominó a unas obras que están paralizadas al no disponer el Mallorca de los permisos necesarios para llevarlas hacia delante.
Donde si hubo un mayor seguimiento fue en un grito de los aficionados que dejaba muy claro su sentir. «El Mallorca somos nosotros» cantó al unísono la Grada Jove con el apoyo de diversos seguidores de otros sectores del campo. También hubo recuerdo al Barcelona. «Es del Barça, Cerdá es del Barça», cantaron unos aficionados que nada más pitarse el final del encuentro volvieron a reproducir sus cantos contra un Cerdà que, cabe recordar, tiene hoy una cita más que importante en el Consejo de Administración del Mallorca a partir de las cuatro de la tarde.
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