Gijón: la peregrinación gozosa
El de Gijón no es un desplazamiento más para la hinchada realista porque el que no estuvo, lo vivió desde la distancia o se lo han contado. Este lugar siempre estará marcado por el gol de Zamora de hace 35 años que regó de gloria Gipuzkoa y por el recuerdo de qué hacía y dónde se encontraba cada hincha realista en ese momento.
La buena marcha de la Real y el hecho de poder hacer el trayecto por autopista y en apenas tres horas y media en coche y algo más de cuatro en autobús animaron a muchos realistas a desplazarse durante el fin de semana a la localidad asturiana y jalear al equipo de Eusebio Sacristán en El Molinón.
Más de 600 hinchas realistas animaron a los suyos en el mítico campo y pintaron de txuri urdin las calles céntricas de Gijón desde media mañana de ayer.
Los más animados acudieron el viernes y vuelven hoy. Otros esperaron hasta el sábado -como la Peña Algorri de Zumaia-, pero el grueso de la afición se desplazó ayer desde Donostia en autocares.
En total, miembros de 12 peñas txuri urdin fueron ubicados en el sector de visitantes de El Molinón, en una esquina, tanto en el anillo inferior como en el superior.
La peña Altza, por ejemplo, reunió a 55 hinchas y partió desde ese barrio donostiarra a las seis de la mañana de ayer. Tras recoger a otros seguidores en Amara y Zarautz llegó a Gijón un poco antes de las once. Con ellos, su presidente, Paco Montesinos, que recordó que él vio a Zamora marcar su gol desde la grada y la cola de autobuses que se formó en la calle Easo aquella mañana del 26 de abril de 1981.
Todavía conserva la camiseta blanquiazul que se compró ese día.
Goazen Erreala se desplazó con 68 seguidores, que tras probar la sidra, comieron enfrente de la playa de San Lorenzo. Junto a ellos no faltaron miembros de Antsoaingo Txuriurdin Lagunak, cuya pancarta encabezó la kalejira posterior.
También en el día, pero en coches particulares, acudieron nueve integrantes de la meritoria Bizkaia Txuri Urdin, que no perdió la ocasión de catar el cachopo.
Cánticos en apoyo a Williams
En torno a un centenar de hinchas txuri urdin se dieron cita a las 16.30 horas en la Plaza Mayor para partir en kalejira hacia el campo.
La lluvia que les había acompañado durante buena parte de la mañana cesó y el sol dio lustre a una caminata de una hora por la playa de San Lorenzo que por fin fue totalmente pacífica.
Una hora antes del encuentro, en torno a medio centenar de aficionados realistas ya estaban apostados en el campo, y entre otros, entonaron cánticos en apoyo a Iñaki Williams . El del final del partido fue el ‘Txoria, txori’, antes de la Marcha de San Sebastián, claro. El premio, las camisetas de Illarra, Yuri, Rulli, Iñigo, Carlos Martínez, Navas, Prieto, Oyarzabal y Zurutuza.
Y el equipo no falló. Partidazo. Tres goles. Tres puntazos.
Toneladas de ilusión.
Artxi, la peña unipersonal y el irlandés Daithi
Más de 600 aficionados realistas en Gijón y más de 600 historias distintas. Una de las curiosas es la de Artxi, aficionado de 42 años del barrio de Intxaurrondo de Donostia, que se jacta de presidir una peña unipersonal, que, evidentemente preside. Se llama Bhoys Anoeta y es feligresa de la Real Sociedad y del Celtic de Glasgow.
Junto a él viajó otro seguidor peculiar, Daithi, traducción gaélica de David, originario de Newry, una localidad del ‘Norte de Irlanda’, como él mismo señala. Lleva nueve años
en Donostia, se ha casado con una guipuzcoana, y se ha hecho de la Real, pero su equipo del alma es el Celtic de Glasgow. Por eso pide a Jokin Aperribay la celebración de un amistoso contra los blanquiverdes de Escocia en Anoeta. Asegura que los bares de Amara y lo Viejo lo agradecerían.
La representación de la afición de la Real en Gijón fue internacional porque no faltó el holandés Ben Parhan y los miembros de Maite Taldea, de la que es responsable. Para el ínclito Patxi Iraizoz, el hincha de la bandera y la gorra, fue su viaje número 263 con el equipo txuri urdin. Casi nada .
No hay comentarios:
Publicar un comentario