El juez Gustavo Irribarren hizo lugar al pedido de la Fiscalía y procesó con prisión a los siete hinchas de Peñarol que se encontraban detenidos por un delito de receptación, según informaron fuentes del caso a El País.
El pedido había sido realizado por el fiscal Juan Gómez en el marco de los robos ocurridos en la tribuna Ámsterdam durante el clásico del domingo, el cual fue suspendido a causa de violentos incidentes entre barras aurinegros y grupos de choque de la Guardia Republicana.
Los siete procesados son mayores de edad, cinco son hombres y dos son mujeres. Cuatro de ellos fueron detenidos en Salto.
Según indicó Gómez, el delito quedó probado ya que las personas involucradas subieron fotos a las redes sociales, consumiendo los productos hurtados durante la asonada, la cual según la Policía fue planificada por narcotraficantes.
Juez no tuvo información previa de lo que pasaría.
El fiscal de Corte, Jorge Díaz, aseguró que los incidentes ocurridos "no son casualidad" y que detrás hay una organización. Sin embargo, ni el juez Gustavo Iribarren ni el fiscal José Gómez contaron antes de los hechos datos concretos de que ocurrirían incidentes.
Fuentes judiciales y de la Fiscalía dijeron a El País que todo giró en el marco de las especulaciones, teniendo en cuenta que se trataba de un partido de alto riesgo y que por eso se coordinó con el Ministerio del Interior las acciones a seguir si se daban hechos, pero no contaron con elementos concretos.
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