La grada supletoria instalada en el fondo sur de La Condomina fue objeto de críticas por parte de la afición del Real Murcia, que se quejó de que solo estaba sujetada por bridas de plástico y que no reunía las medidas de seguridad necesarias para un evento como el derbi: «La grada no era lo suficientemente consistente, no era la adecuada. Era una grada para eventos más tranquilos. En el fútbol la gente salta y anima, y esta no paraba de moverse. Después del gol, muchos decidieron bajarse, porque decían que no estaban seguros en ella. Esto se hubiera solucinado preguntándonos antes a nosotros, que tenemos experiencia», dice Miguel Martínez, presidente de los peñistas.
Expulsados del estadio
El UCAM, por su parte, avisó por la megafonía del estadio en varias ocasiones a los aficionados granas sobre la peligrosidad de botar encima de esta y de las consecuencias que podía acarrear seguir haciéndolo. Además, el club universitario se queja de los desperfectos en las sillas y la estructura ocasionados por un grupo de seguidores granas.
Por otro lado, la Policía Nacional desalojó de la misma grada a entre diez y quince aficionados granas por invadir continuadamente el espacio existente entre la grada y las vallas de publicidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario