Aproximadamente dos centenares de aficionados, se manifestaron en la tarde de este jueves delante de la sede del Celta, en la cual tenía lugar un acto del Partido Popular en el que intervenían Pablo Casado y Alberto Núñez Feijóo.
La policía tuvo que rodear el edificio del club vigués para que pudiesen acceder los participantes a la conferencia.Varias peñas, a las que se unieron otros grupos, convocaron una protesta por lo que entienden politización del club en los últimos tiempos y su cercanía al Partido Popular. Los manifestantes no pararon de gritar y abuchear, desde el exterior, durante todo el acto y en el acceso de los políticos e invitados al mismo.
El malestar del seguidor céltico, con este tipo de actos, ya se mostró cuando hace apenas unas semanas fue Adolfo Suárez Illana el que participó en una charla también en la sede del club vigués.
El rechazo a que el Celta ceda sus espacios a actos políticos es patente por parte de una gran mayoría de aficionados.Lo normal es que el el club vigués, tras lo sucedido en las últimas horas, opte por no volver a realizar actos políticos en su edifico, y más teniendo en cuenta la delicada situación que atraviesa el presidente Carlos Mouriño y sus colaboradores directos, en cuanto a su relación con la grada de Balaídos.El máximo accionista ha ido perdiendo el respaldo de sus seguidores, y su aceptación por parte de los mismos se ha ido deteriorando de forma más que palpable en los dos últimos años, desde que comenzase con su amenaza de llevarse el club de la ciudad de Vigo.
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