Todo comenzó con un gesto del jugador David Beckham, quien lanzó al público la camiseta que usó durante un partido en el estadio Aloha, en Hawai.
Ahora la disputa sobre la camiseta entre dos niños ha desatado en una desagradable pelea entre sus familias con tintes legales que ha dejado al gerente general de equipo Los Angeles Galaxy en completa incredulidad.
Los chicos de Honolulu eran muy amigos y jugaban en el mismo equipo de fútbol.
Hasta que Beckham se les acercó al finalizar el partido de exhibición celebrado en la isla el 20 de febrero entre el Galaxys y el Gamba Osaka de Japón.
Eric y Yoshika Kerr dicen que fue su hijo de 10 años quien cargó con un cartel que atrajo la atención del jugador y lo motivó a lanzarle la camiseta.
Wilfred y Yoshika Ho aseguran que su hijo de 9 años la tomó primero y que luego de una pequeña escaramuza con otros dos chicos la policía resolvió que él debía tenerla.
Wilfred Ho considera que una foto publicada el jueves en la portada del periódico The Honolulu Advertiser es su mejor prueba.
La imagen muestra al hijo de Ho peleándose la camiseta con otros dos menores. El hijo de los Kerr está parado detrás del hijo de los Ho, sosteniendo un cartel, sin involucrarse en la reyerta.
Los Kerr le dijeron al periódico que ellos nunca quisieron quedarse la camisa, sino que estaban dispuestos a compartirla. Incluso sugirieron la custodia compartida entre ambas familias.
Wilfred Ho indicó que trataron de clarificar la situación con la otra familia que comenzó a enojarse, por lo que pensaron que era mejor no prestársela.
Los abogados de Kerr, que amenazaron con iniciar una acción legal, declinaron hacer comentarios sobre el caso a la AP, mientras que los representantes de Ho no contestaron los mensajes dejados.
Alexi Lalas, el gerente general del Galaxy señaló al periódico que ni Beckham ni el equipo tuvieron intención de que una cosa así sucediera.
Mi sugerencia es que el juez tome un par de tijeras, corte la camisa por la mitad y le de un pedazo a cada uno, declaró.
Ahora la disputa sobre la camiseta entre dos niños ha desatado en una desagradable pelea entre sus familias con tintes legales que ha dejado al gerente general de equipo Los Angeles Galaxy en completa incredulidad.
Los chicos de Honolulu eran muy amigos y jugaban en el mismo equipo de fútbol.
Hasta que Beckham se les acercó al finalizar el partido de exhibición celebrado en la isla el 20 de febrero entre el Galaxys y el Gamba Osaka de Japón.
Eric y Yoshika Kerr dicen que fue su hijo de 10 años quien cargó con un cartel que atrajo la atención del jugador y lo motivó a lanzarle la camiseta.
Wilfred y Yoshika Ho aseguran que su hijo de 9 años la tomó primero y que luego de una pequeña escaramuza con otros dos chicos la policía resolvió que él debía tenerla.
Wilfred Ho considera que una foto publicada el jueves en la portada del periódico The Honolulu Advertiser es su mejor prueba.
La imagen muestra al hijo de Ho peleándose la camiseta con otros dos menores. El hijo de los Kerr está parado detrás del hijo de los Ho, sosteniendo un cartel, sin involucrarse en la reyerta.
Los Kerr le dijeron al periódico que ellos nunca quisieron quedarse la camisa, sino que estaban dispuestos a compartirla. Incluso sugirieron la custodia compartida entre ambas familias.
Wilfred Ho indicó que trataron de clarificar la situación con la otra familia que comenzó a enojarse, por lo que pensaron que era mejor no prestársela.
Los abogados de Kerr, que amenazaron con iniciar una acción legal, declinaron hacer comentarios sobre el caso a la AP, mientras que los representantes de Ho no contestaron los mensajes dejados.
Alexi Lalas, el gerente general del Galaxy señaló al periódico que ni Beckham ni el equipo tuvieron intención de que una cosa así sucediera.
Mi sugerencia es que el juez tome un par de tijeras, corte la camisa por la mitad y le de un pedazo a cada uno, declaró.
No hay comentarios:
Publicar un comentario