Primero se dijo que un hincha de San Lorenzo disparó desde un auto. Después, que los disparos habían salido desde La Quemita. Luego hubo una ronda de testimonios citados por el fiscal Marcelo Retes (la causa no tiene todavía juez por no haber ningún imputado) sin prácticamente ningún avance significativo para la investigación. El crimen de Emanuel Alvarez transita por el mismo sendero de los últimos asesinatos en el fútbol argentino: un camino judicial oscuro y con muchas piedras y, en la mayoría de ellos, sin resultados concretos ni la certeza de un futuro de estrado, como lo demuestra el siguiente repaso de algunos casos testigo sin resolución:
Caso Marcelo Cejas, el hincha de Tigre asesinado el 25 de junio de 2007, en Mataderos, a la salida del estadio de Nueva Chicago. No hay implicados y la causa corre peligro de archivarse. La causa recayó en el Juzgado de Instrucción Nº 2, a cargo del juez Omar Aníbal Peralta. A pedido de Favifa (Familiares de víctimas del Fútbol Argentino), la investigación pasó de la comisaría 42a -su titular, Claudio Stábile, jefe del operativo aquel día, está imputado- a la División de Investigaciones de Conductas Delictivas en Espectáculos Deportivos. Además de la búsqueda de los asesinos, la causa tiene derivaciones múltiples: hay videos en los que se ve a policías pasando delante de un Cejas agonizante y sin socorrerlo. Por otra parte, la comisión directiva de Chicago espera por el juicio oral por omisión de recaudos de organización por parte de la justicia contravencional.
Caso Gonzalo Acro, muerto el 9 de agosto de 2007, dos días después de ser atacado a balazos a la salida de un gimnasio por la pelea de la interna de River. La causa la lleva adelante el juez Luis María Rodríguez, y si bien tiene seis detenidos, entre ellos los hermanos Alan y William Schlenker, quedan cuatro prófugos, entre los que estarían los autores materiales. El juicio oral está muy lejos...
Caso Fernando Blanco, el hincha de Defensores de Belgrano muerto el 27 de junio de 2005 por un ataque luego de un partido contra Huracán, a la salida del estadio de Parque Patricios. La causa se encuentra en el Juzgado de Instrucción N° 26 y las sospechas apuntan a la policía, porque el chico, de 17 años, murió presuntamente como consecuencia de los golpes que recibió cuando fue detenido sin motivos claros. Cinco días después del asesinato, el entonces jefe de la Policía Federal, Néstor Valleca, no descartó que la fuerza que conducía "sea responsable en el hecho". Pero no hay apresados: sólo fue separado de la fuerza el cabo primero Marcos Lagorio, quien conducía el móvil donde lo trasladaban a Blanco.
Caso Claudio Puchetta y Claudio Ponce, los hinchas de Newell s asesinados el 20 de abril de 2003 en un enfrentamiento con la hinchada de River en el paraje Lima de la ruta Panamericana. La causa la lleva el fiscal Marcelo Pernici, de la UFI número 5 de Campana. No hay detenidos ni acusados por las dos muertes. Es probable que se archive.
Caso Gustavo Rivero, el hincha de Independiente asesinado de un balazo el 17 de febrero de 2002 antes de un partido con Racing. La causa la lleva el Tribunal Oral Nueve de Lomas de Zamora, está elevada a juicio oral, pero espera desde hace varios meses fecha de realización. Hay tres integrantes de la Guardia Imperial con prisión domiciliaria. Al postergado juicio que nunca llega irían 27 barras de Racing, acusados de asociación ilícita, homicidio calificado, lesiones graves, coerción y resistencia a la autoridad. La lucha contra la violencia en el fútbol necesita de muchas patas. La de la Justicia pareciera que no pisa fuerte...
Condena para dirigentes de Nueva Chicago Por “omisión de recaudos”, cuatro dirigentes de Chicago, entre ellos su presidente, Antonio Filomeno, fueron condenados ayer por la Justicia a no asistir a los partidos que juegue su club, a 20 días de arresto en suspenso y a realizar tareas comunitarias, a raíz de los incidentes del 25/6/2007, cuando murió el hincha de Tigre Marcelo Cejas. Los otros dirigentes son Genaro Criscuolo, Jorge Riveyro y Alberto Librante.
Caso Marcelo Cejas, el hincha de Tigre asesinado el 25 de junio de 2007, en Mataderos, a la salida del estadio de Nueva Chicago. No hay implicados y la causa corre peligro de archivarse. La causa recayó en el Juzgado de Instrucción Nº 2, a cargo del juez Omar Aníbal Peralta. A pedido de Favifa (Familiares de víctimas del Fútbol Argentino), la investigación pasó de la comisaría 42a -su titular, Claudio Stábile, jefe del operativo aquel día, está imputado- a la División de Investigaciones de Conductas Delictivas en Espectáculos Deportivos. Además de la búsqueda de los asesinos, la causa tiene derivaciones múltiples: hay videos en los que se ve a policías pasando delante de un Cejas agonizante y sin socorrerlo. Por otra parte, la comisión directiva de Chicago espera por el juicio oral por omisión de recaudos de organización por parte de la justicia contravencional.
Caso Gonzalo Acro, muerto el 9 de agosto de 2007, dos días después de ser atacado a balazos a la salida de un gimnasio por la pelea de la interna de River. La causa la lleva adelante el juez Luis María Rodríguez, y si bien tiene seis detenidos, entre ellos los hermanos Alan y William Schlenker, quedan cuatro prófugos, entre los que estarían los autores materiales. El juicio oral está muy lejos...
Caso Fernando Blanco, el hincha de Defensores de Belgrano muerto el 27 de junio de 2005 por un ataque luego de un partido contra Huracán, a la salida del estadio de Parque Patricios. La causa se encuentra en el Juzgado de Instrucción N° 26 y las sospechas apuntan a la policía, porque el chico, de 17 años, murió presuntamente como consecuencia de los golpes que recibió cuando fue detenido sin motivos claros. Cinco días después del asesinato, el entonces jefe de la Policía Federal, Néstor Valleca, no descartó que la fuerza que conducía "sea responsable en el hecho". Pero no hay apresados: sólo fue separado de la fuerza el cabo primero Marcos Lagorio, quien conducía el móvil donde lo trasladaban a Blanco.
Caso Claudio Puchetta y Claudio Ponce, los hinchas de Newell s asesinados el 20 de abril de 2003 en un enfrentamiento con la hinchada de River en el paraje Lima de la ruta Panamericana. La causa la lleva el fiscal Marcelo Pernici, de la UFI número 5 de Campana. No hay detenidos ni acusados por las dos muertes. Es probable que se archive.
Caso Gustavo Rivero, el hincha de Independiente asesinado de un balazo el 17 de febrero de 2002 antes de un partido con Racing. La causa la lleva el Tribunal Oral Nueve de Lomas de Zamora, está elevada a juicio oral, pero espera desde hace varios meses fecha de realización. Hay tres integrantes de la Guardia Imperial con prisión domiciliaria. Al postergado juicio que nunca llega irían 27 barras de Racing, acusados de asociación ilícita, homicidio calificado, lesiones graves, coerción y resistencia a la autoridad. La lucha contra la violencia en el fútbol necesita de muchas patas. La de la Justicia pareciera que no pisa fuerte...
Condena para dirigentes de Nueva Chicago Por “omisión de recaudos”, cuatro dirigentes de Chicago, entre ellos su presidente, Antonio Filomeno, fueron condenados ayer por la Justicia a no asistir a los partidos que juegue su club, a 20 días de arresto en suspenso y a realizar tareas comunitarias, a raíz de los incidentes del 25/6/2007, cuando murió el hincha de Tigre Marcelo Cejas. Los otros dirigentes son Genaro Criscuolo, Jorge Riveyro y Alberto Librante.
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