La policía británica hablará con los directivos de los clubes ingleses Liverpool y Everton con relación a las acusaciones de insultos y golpes a los jugadores de ambos equipos por parte de algunos hinchas durante el derbi disputado entre ambos el pasado domingo en Anfield, confirmó hoy un agente. Según parece, el capitán del Everton, Phil Neville, recibió un escupitajo y fue golpeado en la espalda por un seguidor, incidente que será investigado por los agentes policiales. Además, en ese compromiso se escucharon procedentes de las gradas cánticos que aludían a la hija del capitán del Liverpool, el internacional inglés Steven Gerrard. Las cámaras de televisión grabaron imágenes en las que se ven a varios aficionados que increpan a Neville en la segunda mitad del derbi, algo que también le ocurre a Gerrard en un momento en que se dispone a lanzar un córner.
El portavoz del Everton, Ian Ross, comentó que este club ha considerado "necesario" involucrar a la policía y a los empleados de seguridad al no poder sostener una situación "en la que los aficionados establezcan contacto físico con los jugadores durante el partido". "Queremos asegurarnos de que esto no vuelve a suceder en un derbi de Meseyside o en cualquier otro partido", añadió.
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