Once seguidores de los Glasgow Rangers fueron inculpados este jueves por los actos de violencia sucedidos el miércoles por la noche, con motivo de la final de la Copa de la UEFA, que su equipo perdió por 2-0 ante el Zénit de San Petersburgo, anunció la policía de Manchester.
Ocho de esos aficionados fueron inculpados por perturbar el orden público, otro por agresión, otro por embriaguez en un recinto deportivo y el último por lanzar un proyectil, explicó la policía.
Unos 100.000 hinchas de los Rangers viajaron a Manchester, la mayoría para seguir el partido en pantalla gigante, con la esperanza de ver a su equipo convertirse en el primer club escocés en ganar un trofeo europeo en 25 años.
La violencia estalló cuando una de las pantallas gigantes se averió. Policías con escudos y bastones terminaron cargando contra los hinchas, que les lanzaban botellas y latas. Después del partido, hubo enfrentamientos entre las fuerzas policiales y seguidores de los Rangers, que causaron daños materiales.
Ocho de esos aficionados fueron inculpados por perturbar el orden público, otro por agresión, otro por embriaguez en un recinto deportivo y el último por lanzar un proyectil, explicó la policía.
Unos 100.000 hinchas de los Rangers viajaron a Manchester, la mayoría para seguir el partido en pantalla gigante, con la esperanza de ver a su equipo convertirse en el primer club escocés en ganar un trofeo europeo en 25 años.
La violencia estalló cuando una de las pantallas gigantes se averió. Policías con escudos y bastones terminaron cargando contra los hinchas, que les lanzaban botellas y latas. Después del partido, hubo enfrentamientos entre las fuerzas policiales y seguidores de los Rangers, que causaron daños materiales.
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