Han tenido que esperar casi un cuarto de siglo pero, finalmente, los aficionados, jugadores, técnicos y directiva del Elche F.C. han podido celebrar este domingo como tocaba el ascenso matemático de su club a Primera División.
Lo han hecho con un recorrido por las calles de la ciudad que empezó nada más llegar el equipo de Almería, donde jugó por la mañana.
Desde 18.45 horas, el Elche recorría distintos barrios de la ciudad con un autobús descapotable hasta llegar hasta el ayuntamiento, donde era recibido por la alcaldesa Mercedes Alonso y la corporación municipal.
A lo largo del recorrido, según fuentes de la policía local, se congregaban aproximadamente 25.000 personas que vitoreaban a su paso a los jugadores y entonaban todo tipo de cánticos para celebrar el ascenso.
Los jugadores, ataviados con bufandas, camisetas conmemorativas del ascenso, gorras y sombreros blancos y verdes, accedían al consistorio ilicitano, donde Mercedes Alonso agradecía el esfuerzo a los futbolistas, técnicos y consejo de administración por haber devuelto al Elche a Primera.
La alcaldesa de Elche destacó el hecho de que muchas generaciones de ilicitanos no hayan podido disfrutar de un Elche de Primera, por lo que se mostró "muy orgullosa" de que haya sido esta plantilla la que ha logrado una gesta que será "recordada siempre".
Posteriormente, los jugadores salían al balcón del ayuntamiento para dirigirse a los aficionados congregados en la plaza de Baix.
Desde la fachada del consistorio los jugadores agradecían a la afición el apoyo durante toda la temporada y los seguidores ilicitanos coreaban los nombres de prácticamente todos los futbolistas e interpretaban al unísono todo tipo de cánticos.
El más vitoreado de todos era el técnico valenciano Fran Escribá, quien ha asegurado que el "mérito del éxito conseguido" ha sido de los jugadores, a los que ha felicitado públicamente por su entrega, profesionalidad y dedicación.
Durante la celebración se pudo observar como Ferrán Corominas, máximo goleador del equipo, y su compañero Jordi Xumetra exhibían camisetas con una fotografía de Dani Jarque, futbolista fallecido en 2009 y con el que ambos coincidieron en el Espanyol.Tras la visita al ayuntamiento, la caravana de celebración del ascenso se desplazaba al estadio Martínez Valero, donde los aficionados acudían en masa y cubrían una gran parte del aforo del recinto.
En el estadio, por megafonía, presentaban a todos los jugadores y técnicos de la plantilla que accedían al campo hasta formar en el centro del terreno de juego en un acto en el que se reconocía también a las categorías inferiores, a las peñas y exjugadores del club.
La celebración contó con un espectáculo de luz y sonido acompañado por efectos pirotécnicos como antesala de la presentación de todos los responsables del ascenso de Elche.
Tras la fiesta en el terreno de juego, jugadores, técnicos y consejo de administración, así como sus familiares, ponían fin a las celebraciones con una cena en un restaurante de Elche.
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