El presidente del Parma Tommaso Ghirardi aseguró que la muerte ayer de un aficionado de su equipo fue accidental, un incidente que se produjo en los instantes previos al encuentro de la liga que debían jugar el equipo parmesano y la Juventus y que finalmente fue suspendido. Matteo Bagnaresi, de 28 años, fue atropellado por un autobús de aficionados de la Juventus. "No fue por ninguna pelea, pasé por la zona veinte minutos antes del incidente y no vi nada, ni botellas rotas ni nada en concreto. Nuestros aficionados son correctos", explicó Ghirardi al diario italiano 'Gazzetta Dello Sport'. La policía explicó que aficionados de los dos equipos se lanzaron insultos en una estación de servicio camino de Turín donde ocurrió el fatal accidente. El conductor del autobús, Siro Spolti, no vio a Bagnaresi y lo atropelló cuando intentaba abandonar la zona para evitar problemas.Sin embargo, el asunto no está claro porque tanto Spolti, que se encuentra bajo investigación policial, como aficionados de la Juventus aseguraron que algunos hinchas del Parma vertieron amenazas y llegaron a arrojar botellas.Según la prensa italiana, Bagnaresi era miembro de un grupo ultra y ya había cumplido una sanción de tres años que le prohibía acceder a cualquier estadio tras un incidente anterior, también con aficionados de la Juventus.Ahora, los organizadores del Calcio deberán fijar una nueva fecha para la disputa del partido suspendido entre el Parma y la 'Vecchia Signora', que probablemente se jugará el próximo día 16 de abril.
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