El traslado de aficionados del Tenerife a Gran Canaria será, como se esperaba, masivo. A los 1.500 que caben en el sector de la grada que habilitará la UD Las Palmas, hay que sumar algunos cientos más que se sentarán en otras zonas del estadio de Siete Palmas al haber comprado las entradas en los puntos de venta habituales del club de Pío XII.
Hay blanquiazules que no encontraron una vía más cómoda para ver el partido in situ, pues las que ofertaban diferentes agencias de viajes están agotadas desde hace días y el club apenas puso a la venta 200, pues destinó la mayoría de las que le facilitó la UD (unas 600) a Halcón Viajes, dado que las necesitaba para satisfacer a los cientos de seguidores que estaban en lista de espera desde la semana pasada.
La compañía había solicitado a Las Palmas que aumentara el número de entradas que le facilitó (unas 800), pues en apenas unos días se agotaron los packs que ofertó y que incluían el traslado el mismo día del partido y la localidad. La respuesta fue negativa.
La noche a la intemperie
De esta manera, las entradas que el Tenerife repartió, bajo la estricta condición de que solo serían vendidas a sus socios, quedaron agotadas en apenas dos horas ayer por la mañana. Hubo incluso abonados que pasaron la noche por fuera de las taquillas del Heliodoro. Pese a ello, fuentes del club indicaron a MARCA que todos los abonados que lo desearon pudieron adquirir su localidad.
La mayor parte saldrán de Tenerife en uno de los dos barcos que fletará Fred Olsen en horario especial. El primero saldrá a las 15.30 horas y el segundo a las 16.30. Partirá un tercero a las 10.30 horas en el que hay previsto que viaje otro grupo, aunque no tan numeroso como el de los siguientes.
El regreso de la mayor parte de los aficionados tinerfeñistas se hará justo después del pitido final del partido. Está previsto que dos barcos con capacidad para más de 1.500 personas salgan entre la una y la una y media de la madrugada del puerto de Agaete.
No hay comentarios:
Publicar un comentario