El fútbol es un deporte que levanta pasiones y en ocasiones, también genera tensiones. Las pulsaciones de los aficionados aumentan a medida que se desarrolla la temporada. Una sensación que comparten cada fin de semana millones de personas en todo el mundo. A veces, los nervios desembocan en incidentes poco agradables. Episodios que salpican a las instituciones y que pueden llegar incluso a separar a seguidores del mismo bando.
El pasado domingo, más de 11.000 mallorquinistas se marcharon felices a sus respectivas casas después del gol en el descuento de Àlex López que permitió derrotar al Sporting de Gijón (2-1) para continuar soñando con el regreso a la máxima categoría.
Un empleado de Prosegur, el más perjudicado
Pero no todos regresaron felices a sus hogares a pesar del brillante triunfo de los suyos. Al acabar el choque, un miembro de la seguridad privada de Prosegur quiso mediar en una riña entre dos amigos de un grupo de fieles seguidores del club barralet. Como en la mayoría de estas ocasiones, fue el más perjudicado.
Un aficionado grabó la escena que ha sido difundida en las redes generando opiniones de todo tipo
Algunos señalan a los aficionados como los culpable mientras otros destacan la «poca profesionalidad» del empleado de la empresa privada de seguridad. Sea como fuere, todos coinciden que no debe volver a repetirse.
¿Qué pasó después?
«Porque no se cuenta que pocos minutos después de esta escena, cuando todo estaba calmado, volvió el segurata de @Prosegur_Es con sus compañeros con una sonrisa en la cara y diciendo “ahora que!” Un profesional barriobajero como la copa de un pino, aqui TODOS tienen parte de culpa», señala uno de los usuarios.
Los hechos ocurrieron este domingo 5 de mayo alrededor de las 13.45 horas cuando el denunciante estaba trabajando en el estadio de Son Moix con motivo de la celebración del partido de liga del Real Mallorca.
mallorcadiario.com ha podido saber que el joven vigilante de seguridad se aproximó a la zona del bar porque se había producido una reyerta entre un grupo de ultras.
Los aficionados comenzaron a increpar al denunciante en tono agresivo diciéndole: “Vete de aquí, ésto no tiene nada que ver con vosotros”.
Una auxiliar, que se había acercado también ante el jaleo, sufrió un empujón y, por ello, el vigilante de seguridad intervino. Ese fue el instante en el que el grupo de ultras desató su furia contra el denunciante propinándole múltiples patadas y golpes por todo el cuerpo, tal y como ha declarado ante la policía.
En el vídeo del que se ha hecho eco mallorcadiario.com, puede apreciarse el devenir de los hechos y como varias personas intervinieron para separar a los ultras del denunciante.
Antes de presentar la denuncia, el vigilante de seguridad acudió al hospital para hacerse diversas pruebas para certificar las lesiones sufridas.
Los hechos ocurrieron este domingo 5 de mayo alrededor de las 13.45 horas cuando el denunciante estaba trabajando en el estadio de Son Moix con motivo de la celebración del partido de liga del Real Mallorca.
mallorcadiario.com ha podido saber que el joven vigilante de seguridad se aproximó a la zona del bar porque se había producido una reyerta entre un grupo de ultras.
Los aficionados comenzaron a increpar al denunciante en tono agresivo diciéndole: “Vete de aquí, ésto no tiene nada que ver con vosotros”.
Una auxiliar, que se había acercado también ante el jaleo, sufrió un empujón y, por ello, el vigilante de seguridad intervino. Ese fue el instante en el que el grupo de ultras desató su furia contra el denunciante propinándole múltiples patadas y golpes por todo el cuerpo, tal y como ha declarado ante la policía.
En el vídeo del que se ha hecho eco mallorcadiario.com, puede apreciarse el devenir de los hechos y como varias personas intervinieron para separar a los ultras del denunciante.
Antes de presentar la denuncia, el vigilante de seguridad acudió al hospital para hacerse diversas pruebas para certificar las lesiones sufridas.
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