Las fanáticas de One Direction acampadas a las puertas del estadio Vicente Calderón desde el mes de mayo para conseguir una buena posición en los conciertos del 10 y el 11 de julio han suspendido la espera nocturna. El motivo: han sido atacadas. A finales de mayo, un grupo de individuos les lanzaron vallas metálicas y botellas dentro de una de las tiendas de campaña en las que se refugiaban, informan. No hubo heridos. Llamaron a la Policía.
«Se decía que habían sido los ultras del atleti, que no nos querían allí. Los guardias de seguridad no salieron hasta que no llegó la Policía», detalla una de las allí apostadas. Los vigilantes de seguridad ya les avisaron un día del riesgo que corrían por las noches.
Desde entonces solo continúan con su espera durante el día. Cuando anochece abandonan el lugar. Una lista a buen recaudo guarda su orden de entrada. Son más de 100 adolescentes las que ya se suman a esta acampada de la «boyband» irlandesa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario