«Ya sabemos que la afición del Torino en principio es pacífica, pero las órdenes son las de registrar hasta los zapatos». Los 2.500 seguidores del Toro que viajan a Bilbao tendrán que superar un estricto cordón de seguridad, como afirmaba uno de los miembros del dispositivo obligado para un partido como el de mañana, en el que se van a desplazar un gran número de seguidores del equipo rival.
Según explicó ayer la Ertzaintza, se establecerá un dispositivo especial de seguridad para el partido de la Europa League que enfrentará al Athletic y al Torino en San Mamés, que ha sido declarado de «alto riesgo». El Departamento de Seguridad del Gobierno vasco informó también que en este dispositivo especial, la Policía Autónoma vasca contará con la colaboración de dos agentes de la Policía italiana que se desplazarán a Bilbao.
«Con las medidas que se establecerán para este partido de vuelta de los dieciseisavos de final de la Europa League, la Policía vasca pretende garantizar la seguridad de los aficionados tanto en el campo de San Mamés y su entorno como en el resto de la ciudad, donde ambas aficiones convivirán durante las horas previas y posteriores al partido», señala desde fuentes de la consejería de Interior.
En principio no se prevén problemas de orden público. En el partido de ida, en Turín, no se produjo ningún incidente reseñable por el gran comportamiento de las dos aficiones, que se ovacionaron mutuamente al final del partido. En las horas previas, en la calle, ningún seguidor del Athletic sufrió percance alguno.
En la jornada de mañana, la Ertzaintza hará «especial hincapié» en el control de accesos al campo y será «rigurosa» para evitar que se introduzcan en el recinto todo tipo de objetos que la Ley del Deporte establece como prohibidos como botellas o bengalas. En el Comunale se encendieron varias, lo que puede acarrerar una multa al Torino por parte de la UEFA.
Los agentes controlarán también los accesos a San Mamés para evitar la presencia de cualquier pancarta o símbolo que contenga mensajes insultantes o que inciten a la violencia. También se impedirá el acceso al estadio de aquellos individuos que se encuentren bajo los efectos del alcohol o las drogas. Por ello, Interior recomienda a los aficionados «que acudan al estadio con una antelación mayor de la habitual para evitar colas y aglomeraciones». La Policía vasca ofrecerá también la «máxima protección» en el acceso al estadio de jugadores y técnicos de ambos equipos.
Fuera del entorno de San Mamés, los agentes se encargarán especialmente de que no se produzcan problemas en los puntos habituales de concentración de los aficionados.
El dispositivo contará con la participación de la Policía Municipal de Bilbao y personal de seguridad privada y del propio club. Entre hoy y el jueves se prevé la llegada a Bilbao de 2.500 aficionados italianos ya con entrada para ver el partido y que viajarán en autobuses, furgonetas, vehículos particulares y en avión.
El dispositivo de seguridad del partido ha establecido la céntrica plaza Moyúa como «punto de encuentro» para los aficionados turineses, con el fin de «acompañarlos con todas las garantías hasta el campo de San Mamés llegado el momento».
Además, la Ertzaintza ha hecho un llamamiento a los hinchas del Athletic y a los vecinos de Bilbao en general para «ofrecer la mejor imagen del equipo y de la ciudad en un evento que va a tener un notable alcance internacional». .
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