Las peleas de hinchas en las gradas es una imagen prácticamente desaparecida de los estadios ingleses en los últimos años. Sin embargo, el pasado fin de semana se vivió un enfrentamiento en Bloomfield Road entre aficionados del Blackpool y el Leeds United, partido correspondiente a la Championship (Segunda división) que terminaba con empate (1-1).
Durante el encuentro, un grupo de seguidores de ambos equipos se enfrentaban en una de las tribunas ante la sorpresa y el miedo de los aficionados que estaban alrededor. Todos menos uno, un niño que pareció disfrutar con el intercambio de golpes como se puede apreciar en la imagen.
El pequeño, sonriente y con cara de pícaro, incluso pareció animar con sus gestos a los «hooligans» para que continuaran la trifulca. Los comentariso en las redes sociales sobre este joven seguidor del Blackpool no han parado de sucederse desde entonces.
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