Una vez más, y viendo las informaciones parciales e interesadas que aparecen en los “medios de comunicación”, nos vemos en la obligación de realizar ciertas aclaraciones a través del presente comunicado. Nuestros miembros y simpatizantes, así como todos los socios del club, deben conocer la verdad de los hechos.
En primer lugar, cabe destacar que, ya anteriormente a los hechos acaecidos en el exterior del estadio el día 9 noviembre con motivo del encuentro Real Madrid C. de F. - Real Sociedad de Fútbol -y ya explicados en un anterior comunicado-, el club decide retirar unilateralmente y de manera arbitraria los pases que cedía al grupo. Aclaremos que dicha cesión de pases no suponía un privilegio del grupo con respecto a cualquier otra peña o grupo de animación del Real Madrid C. de F., ya que era y, para algunos hoy en día, sigue siendo una posibilidad para cualquier colectivo de aficionados que el club considere oportuno. Asimismo, el Real Madrid C. de F. decide prohibir la cesión de abonos a finales de noviembre, pero sólo para los integrantes de la grada joven, pudiendo el resto de socios del estadio proseguir con esta fórmula promovida y auspiciada por el club desde hacía años.
Tras el cambio en la dirección del grupo, los portavoces de la misma se reúnen con la Dirección del Gabinete de Presidencia y con el responsable de seguridad del Real Madrid C. de F. Desde el primer momento se nos asegura que el club no tiene la idea de acabar con Ultras Sur, trasladándonos su intención de integrar al grueso del grupo en el llamado proceso de reorganización de la grada de animación, si bien los hechos venideros no van a demostrar lo mismo, puesto que la postura del club no ha dejado de ser ambigua, indecisa, con más oscuros que claros y aventuramos a asegurar que hasta timorata. Destacamos que el club ofrece la posibilidad de contratar y pagar un sueldo a ciertas personas del grupo para que continúen con su labor de organización y animación en el interior del estadio. Hecho curioso este, que no llegamos a entender de ninguna manera, puesto que nosotros no pensamos hacer de nuestro ocio un negocio, y que nos hace sospechar de las prácticas del club para con los que entienda como socios de confianza. Por otro lado, se nos comenta la existencia de veto para determinadas personas, otro punto que no entendemos, puesto que ni esos compañeros ni ningún otro miembro del grupo ha generado incidentes dentro del estadio, manteniendo en todo momento y desde hace años un comportamiento ejemplar en la grada de fondo sur. Ultras Sur extiende al club su intención de reorganizar el grupo y de seguir en la línea de los últimos trece años tras la vuelta al fondo sur: animación, apoyo incondicional a unos colores, tanto en casa como fuera, y vistosos y coloridos tifos. Garantizamos la seguridad en el interior del estadio, respaldándonos una conducta irreprochable en el Santiago Bernabéu durante más de una década, y, asimismo, transmitimos tranquilidad en el seno del grupo, que va a convivir con más unión, entendimiento, confianza y transparencia que nunca, desmintiendo categóricamente la supuesta radicalización que la que se han hecho eco hasta la saciedad los medios de comunicación. Ultras Sur rompe con la interesada dirección anterior del colectivo y se desentiende de cualquier motivación que no sea la de defender al Real Madrid C. de F.
Sin más información por parte del club en esa primera toma de contacto de esta nueva era, el grupo se reúne y estudia todas las posibilidades para el bien de la entidad y de nuestros miembros.
Posteriormente, y con motivo del partido de Copa del Rey entre el Real Madrid C. de F. y el Olímpic de Xativa el 19 de diciembre, miembros y simpatizantes del grupo que no pueden acceder a la grada joven, deciden comprar entradas de las zonas aledañas para poder continuar animando al Real Madrid C. de F., puesto que, no lo olvidemos, este es nuestro único fin como grupo. Esto parece que no sienta bien en el club y, nuevamente de manera desproporcionada, retira el abono a más de quinientos socios del Real Madrid C. de F. Pese a que se aduce desde el seno del club que son unos doce los participantes en los hechos que precipitan el cambio de dirección del grupo, se decide culpar a todo el colectivo y dejar fuera del estadio a más de quinientos abonados, haciéndose plenamente efectiva esta decisión el día 26 de diciembre de 2013 mediante comunicación escrita, a pesar de que esas doce personas supuestamente involucradas a día de hoy gozan del derecho a la presunción de inocencia.
Creemos que es necesario seguir un correcto procedimiento, en virtud de los estatutos del Real Madrid C. de F., no pudiendo anularse un contrato unilateralmente por una de las partes sin más. A esto hay que sumar que desde hace más de diez días se ha solicitado determinada información al club por parte de un gran número de afectados sin que hasta la fecha éste haya dado respuesta a la citada petición. Información que es vital para que estos socios afectados puedan reclamar sus derechos ante los órganos competentes.
Tras esto se establecen una serie de condiciones por parte del Real Madrid C. de F. para la obtención del abono para la grada joven y en las cuales sobresalen dos. La primera es que ya no es necesario ser socio de la entidad, sino que sirve con pertenecer ya no a una peña del club, sino simplemente a una asociación reconocida por el club. Curiosamente, por esta vía, entra en escena una extraña asociación con poco más de un año de vida que saca al mismo tiempo un comunicado con idénticos planteamientos, y hasta frases puntuales, salidas desde los responsables del club en la reunión celebrada días antes. Al mismo tiempo, uno de los dirigentes de dicha extraña asociación, promueve sus teorías de cómo tendría que ser una grada joven en el estadio. Esta asociación parece el portavoz encubierto del club (y no hay que olvidar que la misma nació como oposición clara a la gestión del actual Presidente del club). Resulta cuanto menos curioso que esta persona tenga casi sesenta años y no se le conozca ninguna gestión de gradas. También sorprende que el club delegue en esta asociación y en otra conocida peña la organización de la grada de animación, desoyendo nuestra propuesta y experiencia en lo que a animar se refiere. La segunda condición es la firma de un compromiso de aceptación de normas y al cual no se le da más detalles de cómo será y que contendrá.
Ya entrados en el nuevo año, se desarrolla otra reunión entre más miembros del grupo y los responsables del club ya mencionados y a los cuales se une el Director del Área Social de la entidad. Se nos vuelve a indicar que se sigue contando con el grupo, aunque siguen sin poder confirmar en qué medidas. Además, se nos trasladan las condiciones que regirán la nueva grada. Destaca la decisión salomónica de expulsar a los mayores de treinta y cinco años, en lo que supone un agravio comparativo entre socios de pleno derecho. Se asegura que toda solicitud de ingreso en la grada de animación será estudiada por separado y que, para casos excepcionales como el de mayores de treinta y cinco años, el club decidirá sin poder confirmarnos cuáles serán los criterios para aplicar el filtro. Paralelamente, vamos comprobando cómo el club va informando al resto de peñas y/o asociaciones que tendrán cabida en la grada o que han presentado su queja por la presunta reventa de entradas para el partido de Copa contra el Club Atlético Osasuna. Si interesa según el interlocutor con el que se encuentren reunidos, se nos responsabiliza de todos los problemas en el funcionamiento presente y futuro de la grada joven, así como se nos acusa de prácticas mafiosas tales como intimidación y coacción. Y, sin embargo, si se trata de jóvenes aficionados y/o socios que muestran su ilusión por compartir grada con nosotros, se les informa de que pueden tener la seguridad de que Ultras Sur va a formar parte importante del nuevo proyecto en un llamamiento desesperado para llenar la grada. Entendemos que muchos socios y miembros de diferentes peñas se encuentran engañados y desde estas líneas nos proponemos hacerles llegar la verdad de la situación actual.
Sobre los hechos que se señalan acontecidos el día 31 de diciembre de 2013 y que nada tienen que ver con un partido de fútbol, no vamos a entrar a valorarlos, puesto que es algo que está en manos de los tribunales y, hasta que ellos no se pronuncien, se debe aplicar el derecho de presunción de inocencia hasta que una sentencia firme diga lo contrario (habida cuenta que lo que haga cada uno a título personal no es responsabilidad del grupo sino única y exclusivamente de ese individuo en particular).
Con motivo del partido de liga entre el Real Madrid C. de F. y el Granada C.F. el 25 de enero, fecha de inauguración oficial de la nueva grada de animación del fondo sur, los componentes del grupo que ya habían sido aceptados deciden acceder al estadio. Sin generar ningún tipo de incidente, se anima al equipo tras el minuto siete y durante un cuarto de hora aproximadamente, momento en el que se decide abandonar el estadio por solidaridad con nuestros miembros que aún siguen esperando la respuesta del club y con los que ya han sido vetados injustamente y que, hoy por hoy, no tendrán la posibilidad de seguir animando a su equipo (en algunos casos, tras treinta años haciéndolo). De este modo, desmentimos categóricamente las informaciones aparecidas en ciertos medios de comunicación por las que se indica que el club, con la colaboración de la Policía Nacional, expulsaba de la grada a unos 50 miembros del grupo por conducta impropia. Desconocemos los motivos por los que se intenta tergiversar toda información referente a Ultras Sur, pero es completamente falso. Si con motivo del partido de Copa frente al Club Atlético Osasuna evidenciamos que el estadio nos necesita, el pasado 25 de enero sólo hicieron falta quince minutos para demostrar nuevamente que somos necesarios. Que nuestra aportación enriquecerá el nuevo proyecto, pero que el grupo necesita ver a todos y cada uno de sus miembros dentro de la grada. Vamos en la misma dirección, aunque el club no quiere verlo.
Deben conocer nuestros simpatizantes, miembros y todos los socios de la entidad que se está aceptando en esa grada a cualquier persona que cumpla los requisitos y no sólo por la fórmula de la entrada electrónica (que sortea la necesidad de ser socio del club), medida que aceptamos y entendemos en función de las necesidades de una grada de naturaleza especial. Lo grave es que se están haciendo nuevos socios automáticamente sin la obligatoriedad de haber pasado por lista de espera. Desconocemos quién da el visto bueno a estos casos y por qué motivos. Otro agravio en relación al sufrido socio que todavía no ha podido optar a un abono.
Esta es la realidad de la situación. El club ofrece informaciones contradictorias según convenga. El club ha provocado un enfrentamiento innecesario entre socios. El club ha vulnerado los derechos de unos quinientos socios abonados (hoy somos nosotros, pero mañana pueden ser otros).
Volvemos a insistir en que nuestro único interés es el de animar a Real Madrid C. de F. de la manera que hemos venido haciendo en los últimos años, con un comportamiento intachable dentro del Santiago Bernabéu, y que Ultras Sur no va a dejar de defender los derechos de todos sus miembros.
Finalizamos este necesario comunicado convocando a todos nuestros miembros y simpatizantes dos horas antes del partido de Copa del Rey frente al R.C.D. Español el próximo martes, 28 de enero.
ULTRAS SUR SIEMPRE FIELES
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