El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número tres de los de La Línea, al que le correspondía el caso por estar de guardia el pasado domingo, citó ayer a declarar como imputado a un aficionado de la Real Balompédica [que pide expresamente ser identificado sólo como Javi] para el que la Fiscalía solicitó tras oír a las partes tres años y seis meses de prisión por un delito de "atentado a la autoridad con el agravante de la utilización de medio peligroso" que afecta a los artículos 550, 551.1 y 552.1 del Código penal. La existencia de este proceso fue desvelada en el día de ayer por Onda Cero y Cope Campo de Gibraltar.
El supuesto delito habría sido cometido el pasado domingo al término del encuentro del grupo IV de Segunda B que disputaron en La Línea la Real Balompédica y el Córdoba B, en concreto en los aledaños del estadio Municipal, cuando un centenar largo de personas se arremolinó en las inmediaciones de la grada de preferencia, a la altura de la salida de vestuarios, mientras el colegiado granadino Antonio Artacho y sus auxiliares permanecían en la caseta.
Javi, de 34 años, es padre de un hijo de diez años y su esposa se encuentra embarazada. El aficionado balono acudió al juzgado a primera hora de ayer como consecuencia de una denuncia interpuesta por el inspector de la Policía Nacional Juan Carlos Barrero, que estaba al frente del contingente policial desplegado en el estadio [ocho personas para más de mil aficionados, según hace constar él mismo].
El agente asegura en su declaración que Javi, dirigiéndose a él y no al colegiado, dijo cuando el árbitro abandonaba el estadio: "Eres un chulo y un maltratador, te voy a quitar la ropa y te tengo que meter en la cárcel". Agrega que lo hacía "al tiempo que lanzaba piedras contra mí y contra el resto de agentes policiales".
El letrado Juan Manuel Muñoz -al que le ha correspondido la defensa del acusado en su condición de abogado de oficio- sostiene que no existen pruebas que incriminen al aficionado y recuerda que "ni fue detenido ni existe un parte de lesiones".
"Había unas ciento cincuenta personas según dicen ellos mismos y mi defendido afirma que no fue él", sostiene Muñoz. "Además, los hechos habría que contextualizarlos, porque se produjeron en medio de una gran tensión, cuando el policía que presenta la denuncia sacó un arma y apuntó a los que allí estaban, lo que provocó un gran revuelo".
Este periódico contactó ayer con el acusado de este delito y aunque remitió a la opinión que pudiese aportar su defensor, sí que sostuvo a capa y espada que él no era culpable. "Yo sólo le gritaba al árbitro, nunca a la Policía, y no lancé piedras ni nada".
La vista en la que serán oídas las partes y los testigos que aporten unos y otros se celebrará el próximo día 12 de febrero en el Juzgado número dos de lo Penal de Algeciras a partir de las 10:40 horas.
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