Al menos dos personas resultaron heridas ayer durante la batalla campal entablada entre seguidores radicales del Cádiz y el Xerez Deportivo unos tres cuartos de hora antes de empezar el partido de Primera Andaluza que jugaron el filial amarillo y el conjunto azulino en El Rosal.
Todo apunta a que ambos grupos se habían citado previamente en las inmediaciones de la instalación puertorrealeña. De hecho, integrantes del grupo visitante -unos 20- ya fueron vistos por la zona sobre las nueve de la mañana. La llegada del grupo local que intervino en la brutal pelea -unos 50- se produjo hora y media más tarde y el punto de encuentro fue la puerta de entrada de la Ciudad Deportiva. Allí, sin que la Policía Nacional hubiese hecho aún acto de presencia, se sucedieron carreras y agresiones, para las cuales se emplearon palos de grandes dimensiones y otros objetos contundentes, incluidas sillas de playa y piedras de gran tamaño. La aparición policial sirvió para que cesaran los graves incidentes, con huida de parte de los protagonistas.
Dos de los lesionados en el enfrentamiento, ambos seguidores del Xerez, presentaban golpes y cortes de consideración, por lo que fueron trasladados al cercano hospital. Uno de ellos necesitó que se le aplicaran ocho puntos de sutura en la cabeza y otro tenía maltrecha la mandíbula.
Fuentes policiales confirmaron por la tarde a este periódico que "una Unidad de Prevención y Reacción (UPR) se estaba desplazando desde El Puerto a El Rosal en el instante en que comenzó la refriega. A su llegada se desplegó el personal y se separó a los dos grupos, procediéndose a la identificación de más 40 personas y requisando palos y otros objetos. Se ha abierto una investigación para esclarecer los hechos y determinar la presunta autoría de los implicados en la riña tumultuaria y lesiones". Por tanto, no es descartable que se produzcan detenciones y que a algunos se les imputen hechos delictivos.
La lamentable historia comienza bien temprano, porque el personal de vigilancia de El Rosal asegura que los radicales del Xerez CD llegaron a las instalaciones sobre las nueve de la mañana, pero no entran en las gradas sino que se quedan en el aparcamiento y causan destrozos en los vestuarios de la piscina.
Luego, sobre las once menos veinte de la mañana y cuando conocen que los ultras del Cádiz se están acercando a El Rosal, los radicales xerecistas, pertrechados de palos, piedras y toda arma arrojadiza que encontraron -hasta una silla de playa- se dirigieron a la puerta de acceso, donde esperaron a la banda rival y comenzó una batalla campal en desigualdad numérica -unos veinte xerecistas a los que los cadistas casi triplicaban en número- que acabó con los ultras del Xerez regresando al aparcamiento, momento en el que comenzaron a escucharse las sirenas de la Policía Nacional y los radicales del Cádiz huyeron por los alrededores de El Rosal.
La pelea, que puede apreciarse con nitidez en varios vídeos que circulan por las redes sociales, fue corta pero intensa: comenzó con lanzamiento de piedras, luego hubo peleas cuerpo a cuerpo y con palos y otros objetos contundentes y acaba con más lanzamientos de objetos.
Los incidentes acabaron en cuanto la UPR de la Policía Nacional acotó la zona: unos efectivos se encargaron de los radicales xerecistas dentro de El Rosal y otros persiguieron a los ultras cadistas fuera de la Ciudad Deportiva, llegando incluso a las marismas.
También llegó una ambulancia, en la que fueron evacuados los radicales del Xerez heridos, mientras la Policía identificaba a más de cuarenta ultras que habíaan intervenido en la gresca. Posteriormente, los radicales quedaban en libertad y los xerecistas acudían al Hospital a interesarse por sus compañeros.
Ambos clubes han condenado y lamentado en sus respectivas páginas web los incidentes, y el Xerez CD ha anunciado que pedirá "información a la Delegación del Gobierno por la falta de previsión" que haya podido haber para evitar estas situaciones. En efecto, en el momento de producirse los enfrentamientos -entre las 10:45 y las 11:00 horas, no hora y media antes del partido como reza el comunicado del Cádiz ni una hora antes como dice el del Xerez- tan sólo había un par de miembros de la seguridad privada del Cádiz en El Rosal.
A pesar de no estar declarado como partido de alto riesgo, en el momento de producirse la reyerta ya estaban en camino varias Unidades de Prevención y Reacción (UPR) de la Policía Nacional; desde el Cádiz se asegura que se notificó tanto a la comisaría de Cádiz como a la de Puerto Real la posibilidad de que hubiera incidentes el pasado miércoles por conducto oficial e incluso en persona el pasado viernes.
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